Esta es una traducción de la página original en inglés.

Peligros de los sistemas privativos en la enseñanza en línea

Desde marzo de 2020, los centros educativos de todo el mundo se han visto obligados a trasladar sus actividades cotidianas a la enseñanza en línea a causa de la emergencia sanitaria provocada por el COVID-19. Para muchas escuelas ese fue un primer paso importante hacia la digitalización. Sin embargo, la transición hacia la enseñanza a distancia ha traído consigo a un huésped no deseado: el software que no es libre para las clases en línea.

Muchas escuelas han adoptado programas de videoconferencia y sistemas de gestión del aprendizaje (LMS) que son software privativo. Las compañías de desarrollo de software utilizan estos programas que no son libres como arma contra los derechos fundamentales de libertad y privacidad de los alumnos y profesores. El software que no es libre es contrario a la educación, ya que prohíbe el intercambio de conocimiento y está diseñado específicamente para impedirlo. En los entornos educativos no se debe dar cabida al software que no es libre.

Existen programas que respetan la libertad fácilmente disponibles para todas las actividades del aula digital, y deben utilizarse en lugar de sus equivalentes privativos.